Transferencia embrionaria: el último paso de la fertilización in vitro
6 hábitos comunes que propician o afectan tu fertilidad
Por Dr. Reinaldo González Ramos
En la actualidad se presume que una de cada 7 personas en edad reproductiva tiene dificultades para fecundar, o bien en el caso de las mujeres, para llevar a término un embarazo.
Toma lápiz y papel y anota las cosas que sí debes hacer y aquellas que no debes hacer si estás en búsqueda de tener hijos.
LO QUE SI DEBES HACER:
1. Alimentarse de forma correcta:
Una de las claves para potenciar la fertilidad en la mujer y el hombre es tener una buena alimentación. En este sentido, estudios recientes han afirmado que es conveniente tener una dieta balanceada, consumir frutas y vegetales diariamente, no consumir comida chatarra, reducir el consumo de grasas, frituras y carnes rojas. También es recomendable tomar ácido fólico de 1 mg al día para disminuir el riesgo de malformaciones en el sistema nervioso central del feto.
2.Mantenerse en el peso adecuado (dieta sana y ejercicio físico moderado):
El peso es un factor que influye notablemente en tu fertilidad, pues tanto la extrema delgadez como la obesidad inciden de forma negativa en la capacidad de tu cuerpo para concebir.
En el trasfondo, muchas mujeres con sobrepeso u obesidad padecen de síndrome de ovarios poliquísticos e insulinorresistencia, causando ciclos anovulatorios o ausencia de ovulación, oligomenorrea o amenorrea (ciclos menstruales de más de 35-40 días, o ausencia de regla por más de 3 meses), y por lo tanto no se pueden embarazar. Estas mujeres se benefician de dieta baja en calorías, baja en hidratos de carbono y ejercicio físico al menos 3 veces por semana, pues al bajar de peso en forma considerable (más de 10% de su peso inicial), pueden reestablecer sus ciclos ovulatorios y embarazarse espontáneamente.
Lo mismo pasa en mujeres anoréxicas, con estrés patológico o que hacen deportes de alto rendimiento, y que a su vez presentan amenorrea y anovulación.
En cualquiera de estos casos, siempre es recomendable ver a un especialista en reproducción para evaluar la necesidad de tratamientos de inducción de ovulación.
En mujeres con peso normal (índide de masa corporal entre 20-25) y/o con ciclos menstruales regulares, la recomendación es mantener una dieta equilibrada y hacer ejercicio físico 3 a 4 veces por semana (30 minutos a 1 hora cada vez).
3. Optimizar la vida sexual:
Las posibilidades de embarazo existen, siempre que se tenga actividad sexual en los días fértiles de la mujer. Como los días fértiles en la mujer pueden variar de un ciclo menstrual a otro, la recomendación más simple es tener relaciones sexuales al menos 3 veces por semana, para así tener más chances de caer en los días fértiles.
Si una mujer tiene ciclos muy regulares y sabe reconocer sus días fértiles por la aparición de moco cervical fértil (transparente y elástico), entonces esos días son los indicados para tener relaciones sexuales. En un ciclo de 28 días, por ejemplo, los días fértiles van desde el día 9 al 14, siendo el día 14 el día de la ovulación. Los días fértiles van siempre desde 4-5 días antes de la ovulación hasta el día de la ovulación. Después de la ovulación, ya se acaba el período fértil.
En cuanto a las posturas sexuales, no existe ningún estudio que demuestre que una postura sea favorable sobre otra o que la posición de la vela o alzar la pelvis luego de tener relaciones sexuales aumente las chances de embarazo.
LO QUE NO DEBES HACER:
1. Fumar:
De acuerdo a la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM, por su sigla en inglés) y diversos estudios nacionales e internacionales, el consumo de tabaco tiene un impacto negativo sobre la capacidad de concebir y de llevar a término un embarazo. Fumar cigarrillos es nocivo para los ovarios de la mujer ya que acelera la pérdida de óvulos y la función reproductiva y puede adelantar el momento de la menopausia. También esta práctica se asocia estrechamente con un mayor riesgo de embarazo ectópico, aborto espontáneo, malformaciones congénitas y restricción del crecimiento intrauterino del feto.
Pero el consumo de cigarrillos no sólo afecta la fertilidad de las mujeres, ya que los hombres fumadores tienen un menor recuento de espermatozoides, menor motilidad -habilidad de moverse espontánea e independientemente- y mayores anomalías en la forma y función de los espermatozoides.
2. Estrés:
Un nivel de estrés patológico conlleva más dificultades para quedar embarazada, pues en algunos casos la mujer deja de ovular y por lo tanto deja de menstruar (amenorrea), y en consecuencia no logra embarazarse. Muchas parejas con infertilidad sufren de estrés, pero mientras la mujer mantenga sus ciclos menstruales normales y regulares, ésta no es la causa de la infertilidad.
Los tratamientos de infertilidad también causan mucho estrés en las parejas, lo que no determina mayores o menores tasas de embarazo; pero de todas maneras es bueno aliviar el estrés con apoyo psicológico o terapias alternativas como acupuntura, reiki, yoga, ejercicio, flores de Bach, imanes, etc, para sentirse mejor durante los tratamientos, sabiendo que esto no incide en la chance de embarazo.
En Clínica Monteblanco contamos con todo este tipo de apoyo para las parejas que realizan tratamientos de alta complejidad.Factores como la ansiedad por el deseo de tener un hijo, angustia, roces en la pareja, las expectativas, la presión del entorno o los sentimientos de frustración generan estrés psicológico en la pareja,lo que puede empeorar el proceso general de tratamiento.
3. Consumir alcohol:
La ingesta de bebidas alcohólicas en exceso incide negativamente en la fertilidad de las personas, al causar daño hepático crónico. Asimismo, el consumo considerable de alcohol, según diferentes estudios, puede incidir en una menor cantidad y calidad de espermatozoides, y reducir los niveles de testosterona.
Por último, es muy importante saber que si no se ha concebido tras más de 12 meses de mantener relaciones sexuales sin uso de métodos anticonceptivos, o luego de 6 meses si la mujer tiene más de 35 años de edad, entonces la pareja padece de infertilidad y debe consultar a un especialista en medicina reproductiva para conocer la causa y ver qué tratamiento necesitan para aumentar sus posibilidades de embarazo.
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